Después de más de dos décadas, Corrientes volvió a ser sede este miércoles de la 80° Asamblea Ordinaria del Consejo Nacional de la Vivienda (CNV), la cual tiene como objetivo reducir el déficit habitacional en la Argentina. De esta manera, el gobernador Ricardo Colombi y el ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda de la Nación, Rogelio Frigerio, encabezaron la apertura del encuentro que reúne a los funcionarios de la Secretaría de Vivienda y Hábitat de la Nación, del cual depende el CNV, y los representantes de los institutos a cargo en cada provincia.
El presidente del CNV, Marcelo Sampablo, titular del Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo (IPVU) de Neuquén, fue quién abrió la Asamblea Ordinaria, que tiene lugar en el salón Gran Paraná de Casinos del Litoral de la ciudad de Corrientes, el cual se extenderá hasta este viernes. Este “es un espacio abierto de discusión y debemos aprovecharlo para debatir entre otras cosas los nuevos programas que generan muchas expectativas”.
Seguidamente y como anfitrión, el interventor del Instituto de Vivienda de Corrientes (INVICO), Bernardo Rodríguez, fue el encargado de realizar las palabras de bienvenida y afirmó que hace mucho tiempo este encuentro no se daba en la Provincia porque “no estaban dadas las condiciones políticas y en ese sentido era importante que ahora nos juntemos aquí, en nuestra casa”.
Adelantó que “el temario es muy interesante, ya que hay algunas cuestiones nuevas de financiamiento”. Al respecto, agregó: “Es importante que en la medida que el Gobierno nacional a través de distintas operatorias logre reactivar el crédito hipotecario, a todos seguramente se nos va descomprimir la presión que tenemos hoy sobre los institutos de viviendas o que teníamos hasta hace un tiempo, donde todas las familias que necesitaban una casa se inscribían y no teníamos excusa para decirles que tenían determinado nivel de ingreso y que debían buscar un crédito; lo que pasa es que el crédito no existía o era muy caro”.
Valoró así que “estos programas nuevos dan cierta tranquilidad y dan esperanzas a muchas familias argentinas, que hoy pueden buscar mediante el esfuerzo y el beneficio de pagar la cuota que están al alcance de sus ingresos, tener una solución habitacional y no depender de los organismos de viviendas”.
En igual contexto, el secretario de Vivienda y Hábitat de la Nación, Domingo Amaya, abordó en su discurso de apertura acerca de un proyecto de ley que se enviará al Congreso para que los recursos del Fondo Nacional de la Vivienda (FONAVI) vayan “directamente” a solucionar el déficit habitacional, es decir, que solo sean administrados para el desarrollo de esta cuestión. Así afirmó que en la Asamblea se librará un Acta en donde se tratará de contar con el apoyo mayoritario del CNV, así los fondos del FONAVI “se destinan a generar alegría y no solo el gasto corriente”.
Igualmente, resaltó que si bien “no es fácil hablar de soluciones habitacionales con 8 millones de argentinos que no tienen agua, 20 millones que no tienen cloacas y gas, en este Plan Nacional de Viviendas están contempladas todas las situaciones”. En este marco se refirió al programa Mejor Hogar, que “otorga un microcrédito a aquellas personas que les pasa la red de gas y a veces es increíble, pero no tienen el dinero para realizar la conexión.
Además, el acuerdo contempla pequeños créditos para mejorar las viviendas, como problemas en los techos, la humedad, entre otras cosas necesarias. Y fue por eso que llamó a los funcionarios presentes que “al entregar las viviendas la hagamos en condiciones, ya que no significa que porque son humildes reciban cualquier cosa”, a lo que agregó que “es nuestra función exigir a las empresas que entreguen las casas como corresponde”.
Por su parte, el subsecretario de Vivienda y Desarrollo Urbano de la Nación, Iván Kerr, manifestó que se promueve el proyecto del FONAVI, porque “queremos garantizar que los fondos sean de los institutos, intangibles, y que sean únicos para las viviendas, garantizarlo legalmente”. También contó que se conformó una mesa para llegar a un acuerdo para la construcción de viviendas en madera, “comprometiéndonos con el Ministerio de Agroindustria que el 10% del total de las viviendas sociales que se construyan en el país sean de madera y para eso llevar adelante todas las modificaciones que hay que hacer para que esos sistemas constructivos sean validados y pueda tener mayor desarrollo de la madera”.
Respecto al crédito hipotecario, destacó que junio fue el mes récord de la década, con 3.700 millones de pesos en crédito otorgado por los bancos: 2 tercios de esa cantidad fueron dados por los bancos públicos y un tercio por los bancos privados.
La subsecretaria de Hábitat y Desarrollo Humano, Marina Klemensiewicz, intervino para contar que el presupuesto este año para el área fue de unos 7 mil millones aproximadamente y se llevan ejecutados hasta el momento el 76%. Haciendo un repaso con los objetivos del Gobierno nacional dijo que la meta física era intervenir en 477 áreas, y “hoy tenemos 365 obras activas con esta manera de intervenir”.
Finalizando su discurso, agregó que del millón de soluciones habitacionales que se propuso el presidente Mauricio Macri, “desde Hábitat estamos aportando un 50%, llegando a 500 mil familias, atacando ese déficit cualitativo que son todos aquellos hogares que hoy lo que falta es agua, cloaca, espacio público, vereda, iluminación, etc.